martes, 17 de marzo de 2009

NOS VAMOS PARA ITALIA (cont. 2)


Barcelona-Niza

A las 6 de la mañana del día 26 nos levantamos para seguir camino hacia la frontera y llegar a nuestro siguiente destino, Niza. Pero al llegar a la frontera tuvimos un parón debido a que el conductor del autobús nº 6 que llevaba a los jóvenes de la Hermandad de la Macarena, no sabía que existía frontera y no llevaba la documentación del autobús. Menos mal que finalmente, este contratiempo pudo subsanarse.


La ciudad de Niza está situada en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul y es uno de los centros turísticos más importantes de la región.
Fue fundada hace más de 2.000 años por los focenses de Marsella y recibió el nombre de Nikaíae. También participó en las diferentes guerras contra Italia siendo aliada de Pisa, pero con la firma del Tratado de Turín, Niza volvió a pertenecer a Francia.







Esa noche los jóvenes de las Hdades del Amor, Amargura y Prendimiento se quedaron a dormir en la estación de ferrocarriles, ya que el hotel que les había sido asignado, dicho con buenas palabras, era "una casa de alegre vida" circunstancia que se repitió en los diferentes hoteles donde estábamos repartidos. En el que yo me alojaba dormimos chicos y chicas en la misma habitación, ya que descubrimos que en el suelo de las habitaciones había una especie de trampillas. De los baños, mejor ni hablar. Otro de los problemas añadidos fue que la agencia de viajes dejó una cantidad de dinero sin pagar en uno de estos hoteles, por lo que el conserje del establecimiento les reclamaba a los jóvenes que lo abonasen, a lo que su representante se negó.
Ocurrió también que, cuando subían las escaleras los miembros de la Hdad de la Macarena para llegar a sus habitaciones, para su sorpresa, fueron recibidos por una mujer que portaba una pistola en sus manos, circunstancia que provocó que todos salieran corriendo.

Con todo este jaleo en Niza, casi no pudimos ver nada y fue todo de película ya que dando un paseo por sus calles nos encontramos con una persecución policial en donde nos tuvimos que refugiar en algún que otro portal, ya que los perseguidos iban a toda velocidad y se subían con sus coches en las aceras llevándose por delante todo lo que encontraban. Menos mal que al día siguiente abandonábamos ya esta ciudad
Parece que lo que escribo es un cuento, pero fué tan real como que yo estoy escribiéndolo ahora mismo.



Y tras una noche muy ajetreada por todo lo sucedido reanudamos nuestro viaje a primera hora de la mañana. Al llegar a la frontera italiana, las palmas y los cantes por sevillanas se repetían en todos los autobuses y a media mañana llegábamos a Pisa.

La ciudad se encuentra en la región de la Toscana y aunque no se conoce fecha concreta de fundación, se sabe que estuvo ocupada por los etruscos y más tarde por los romanos; fue también la ciudad en donde nació Galileo Galilei.

El primer lugar a donde nos dirigimos fue a la Plaza de Miracoli, declarada Patrimonio de la Humanidad. Allí se encuentra el conjunto formado por la Catedral o Duomo dedicada a la Asunción de la Virgen, de estilo medieval y que fue construida en mármol.

Junto a ella la Torre Inclinada que es el campanario de la Catedral y data del siglo XII. Sufrió su inclinación después de iniciarse su construcción, pero en Pisa existen en total tres torres inclinadas, dos de ellas desconocidas para el viajero.





El Baptisterio que es un impresionante edificio de planta circular realizado en marmol, con dos cúpulas de forma cónica superpuestas.




De ese día no guardo un gran recuerdo ya que los miembros que la Hdad de los Estudiantes, que nunca estuvieron en ninguna de las reuniones de la organización de este viaje, pretendían eludir los horarios y rutas que teníamos establecidos y tuve con algunos de ellos una gran discusión, pues pretendían organizarse a su manera. De hecho ese día tuve que cambiarme de autobús, ya que sus comentarios hacia mi persona no dejaron de oirse.

Y tras el almuerzo, continuamos de nuevo la marcha hacia nuestro principal destino, Roma a la que llegábamos ya casi al anochecer.
Todos los que estuvimos en la organización del mismo y después de tantos meses de trabajo, no nos lo podíamos creer, ya estábamos en Roma y mañana..... mañana tendríamos la Audiencia con Su Santidad Juan Pablo II.

2 comentarios:

América dijo...

Amiga!!!!,no obstante el recorrido seguía,las fotografías estupendas cuantos recuerdos!,las anécdotas la verdad que perdona por que a lo mejor y lo mas seguro es que no fue grato,pero aquello del hotel de vida alegre me ha hecho reír,te sigo,que el próximo post seguro tiene una carga emocional muy grande ,un abrazo...

sevillana dijo...

América jajajajaja era por decirlo con unas palabras que no fueran tan fuertes, pero eso fueron los hoteles.
Besitos