sábado, 1 de agosto de 2009

RECUERDOS DE NIÑEZ

En esta imagen aún no había nacido Miguel



Nací un 4 de diciembre de hace ya bastantes años en la Clinica de la Esperanza y traía bastante prisa por conocer el mundo ya que nací con los pies por delante.
Que sorpresa me llevé cuando pasados unos días me llevaron a la casa en la que viviría y me encontré que tenía ya cinco hermanos con los que jugar, aunque yo no sería la última de esta gran familia, ya que a los cinco años de mi nacimiento llegaría mi hermano Miguel.

Vivíamos en la calle Caballerizas. Mis abuelos y mis tios en la primera planta y nosotros en la segunda. Fui como mis hermanas al colegio de La Doctrina Cristiana ubicado en la calle Guzman el Bueno, donde una hermana de mi tio era monja y de vez en cuando, tras el almuerzo, me llevaba a su habitación y me dormía la siesta.

A la salida del colegio, cuando nuestros padres nos recogian nos compraban una pieza de pan con alguna onza de chocolate en una pequeña panaderia que se encontraba frente al colegio. ¡Cuanto han cambiado las cosas!. Ahora se ve a los niños merendar algún producto fabricado hace ya días y con una gran cantidad de ingredientes.

Al ser la más pequeña de mis hermanas nunca estrené uniforme del colegio, siempre iban heredando los de mis hermanas, pero hice algo que ellas no. Me escogieron en el colegio entre muchas niñas para hacer un pase de modelos en la inauguración de unos grandes almacenes, -imaginaos como sería ahora de modelo-.

En el colegio con dos de mis hermanas


Lo pasábamos bien al ser tantos hermanos, pero cuando uno caía con gripe u otra enfermedad parecida, caíamos los demás y a mi madre le faltaban manos para cuidarnos.
Todos pasamos el sarampión. Mi hermano Miguel se metía con nosotras en la cama y teníamos que llamar a nuestra madre y decirle: "¡Mamá, que el chico está metido en la cama con nosotras, ven a sacarlo!". Pero no se contagió.

Sin duda, lo mejor eran los domingos de playa. Solían venir nuestros tios y nuestros primos. Nos levantaban al amanecer y tardábamos horas en llegar ya que para que el coche no se calentara había que parar para echarle agua y de camino para desayunar. La vuelta era la peor, cuando volvíamos quemados por el sol: "no me roces que me duele, echate para allá, mamá que este me está tocando".

También en verano nos llevaban a la antigua carretera de la esclusa. Nos subían al techo del coche junto a una morera y nos atiborrábamos de comer moras. ¡Qué ricas que estaban!. Otras días. sobre todo los domingos, dábamos una vuelta por la Plaza de España, donde nos tomábamos un helado e íbamos a darle de comer a las palomas.



En Semana Santa teníamos sillas en la calle Sierpes y mi madre siempre iba cargada con nuestros bocadillos para la merienda. No nos perdíamos ni una. Todos los años veíamos quien hacía la bola más grande de cera, que despues mi madre utilizaría para que no se le pegara la plancha, ya que aún no existian las planchas a vapor.
Mis hermanos salían en San Esteban, de la que mi abuelo fue uno de sus primeros fundadores, y donde aún hoy día sigue saliendo Miguel.




Pidiéndole antes de salir caramelos a mi hermano



¿Y la Feria? no faltabamos ni un día. En esos años permitian llevar la comida de casa y mi madre se llevaba toda la mañana haciendo tortillas, filetes, etc para que no nos faltara de nada. La Feria estaba en el Prado de San Sebastian y mi padre entraba con el coche hasta la altura de la caseta a la que íbamos y a la voz de "¡ya!" todos nos bajábamos corriendo del coche y nos metíamos en la caseta. Era raro el día que no pasaba un policia preguntando de quién era ese coche, pero al final se marchaba sin hacer nada. Nunca supieron quien era el dueño.

En la Feria




Recuerdo el día que nació Miguel, muy tempranito nos despertó mi padre comunicándonos que ya teníamos un nuevo hermanito, mi madre se encontraba en el piso de abajo con mi abuela. Era gordito, con mucho pelo, pero no me dejaban cogerlo no se me fuera a caer.

Ese día fuimos mi abuelo, mi padre, uno de mis hermanos y yo a Villafranca del Guadalquivir a comprar carne para celebrar el nacimiento y despues a la Plaza de Abastos de Triana.
Han pasado ya muchos años pero lo recuerdo como si fuera ayer.Pero mi abuelo murió. Tengo vagos recuerdos de su muerte, pero si recuerdo que todas las tardes acudían las vecinas a la casa y entonces no se podía jugar, teníamos que estar en silencio y rezar el rosario, costumbre que quedó perdida con el tiempo.

Siempre había en casa alguna celebración, como una Comunión, el santo de alguno de nosotros y entonces nos juntábamos muchos ya que venía toda la familia.









Antes de las Navidades, mi madre le compraba un pavo a un hombre que vendía semanalmente huevos por las casas, y lo dejábamos en la azotea. Todos los días subíamos a darle de comer, pero había que tener mucho cuidado pues daba cada picotazo que ni te cuento y cuando llegaba el día que había que matarlo ya en Navidad, más de uno nos echábamos a llorar.
También en la azotea en un antiguo lavadero mi hermano mayor creó un palomar, tenía muchas palomas y cuando ponían huevos nos permitia entrar con él para ver a los polluelos que habían nacido, pero ¡ojo! no podíamos tocarlos.

Pasaron los años, fuimos creciendo y ya cada uno de nosotros tomamos caminos diferentes, aunque mi hermano Miguel y yo estuvimos bastantes años saliendo juntos, teníamos muchos amigos en común. Pero eso ya es otra historia.

Continuará ..........................

Nota del autor: en todas las fotos yo soy la más pequeñita

17 comentarios:

Juan Duque Oliva dijo...

Pero no os poniais protector para el sol?

Pues ya conozco una modelo.

Muy hermosa historia y muy generoso de tu parte el compartirla con todos.

Besos

La gata Roma dijo...

Miguel nació con mucho pelo pero ¿de qué color? Es mi duda…
¿Cuándo os mudastéis a la calle Sol? ¿y lo de Chele y su tortilla sin huevo? Mmmmmm, imagino que eso va en el segundo capítulo…
Kisses

P.S. Me han entrado unas ganas de comer pan con chocolate…. Y por cierto ¡no olvides contar la guarrada del KassCol! Como se escriba…

sevillana dijo...

Nos ponían crema Luz de Gas pero no eran los protectores como los de ahora y todo el día en la playa, corriendo, haciendo hoyos donde nos metíamos hasta que el agua llegaba a ellos, no parábamos, la tranquilidad llegaba cuando regresábamos a casa, nos duchábamos y a la cama.
Jajajaja lo de modelo estuvo muy bien aunque no tengo ninguna foto de ello, que pena.
Besitos guapo

Jajajaja gata Miguel nació con bastante pelo y todo negro.
No recuerdo el año que nos mudamos pero si te puedo decir que yo entré en el colegio de la calle Socorro en 3º o 4º y lo de la tortila sin huevos..........sin comentarios.
¿todavía le estás dando vueltas a lo de Kascol?
Besitos

América dijo...

Pero bueno,es que no me podía perder esta entrañable historia,guapa,guapaaaaaa,desde peque!...Es que es así se trae desde pequeña!

Las fotografías tan cálidas que os hablan de tu niñez de otros tiempos,costumbres,esto es una maravilla en la que me deleito gracias a tu generosidad,sigo la serie,que me ha encantado todo esto!

Un abrazo enorme y un gran beso....

Esperando otro capitulo!!!

sevillana dijo...

Querida América y que me dices de lo gordita que estaba jajajajaja
Pero los años pasan y ya nos quedan solo los recuerdos y alguna que otra fotografia.
Besitos

Juanma dijo...

América da con el calificativo exacto: entrañable. Así es esta pequeña gran historia familiar que nos cuentas. Haciendo uso de mi título (el del blog, no título nobiliario) debo decir que son muchos recuerdos y ningún olvido, ¿verdad?

Un fuerte beso.

Zinquirilla dijo...

A mí me ha encantado este post, siento debilidad por las fotos antiguas pero sobre todo por las familiares, es como entrar en la intimidad de las casas pero reflejan un época que no he vivido y no volverá.

Sigue escribiendo porfi!

ANTONIO SIERRA ESCOBAR dijo...

Me has quitado 30 años de encima y de golpe. Gracias por compartir tanta generosidad y un beso muy fuerte por derrochar esa sensibilidad que me trae tantos recuerdos de dulce infancia.

sevillana dijo...

Ya podrás leer más adelante querido Juanma que tambien tengo muchos olvidos por algo que me sucedió, pero ahora no te cuento más, ya lo leeras más adelante.
Besitos

Bien o mal Zinquirilla seguiré escribiendo eso no lo dudes y ya me contarás esa época que no vivistes, me has dejado intrigada por ello.
Besitos

¿Qué te he quitado 30 años, Natural de Sevilla? pues yo creo que me he quitado más que tu.
Gracias a ti por compartir conmigo estos recuerdos.
Besos

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

Ole las entradas guapas de verdad, que recuerdos has despertado en mi con tu relato tan entrañable.
Por la foto de familia que pones y al hablar de Miguel Andreu, según deduzco del comentario de La Gata Roma, creo reconocer al chaval mayor que creo es Pepe Andreu con el que coincidí en los primeros años del movimiento de costaleros hermanos aunque él era mayor que yo.
Espero ansioso tus siguientes entradas.
Un beso.

sevillana dijo...

Pues si No cogé ventaja,¡miarma! el mayor de todos es Pepe como bien has conocido y esta es mi gran familia aunque como dije en la entrada faltaba el chiquitin de Miguel.
Más adelante os contaré más cositas, aunque hay un periodo en mi vida de la que no recuerdo casi nada, pero lo dejo mejor para la próxima
Besitos y me alegro verte de nuevo

Unknown dijo...

Como zinquirilla, también siento debilidad por las fotos antiguas, tienen un encanto especial y no se por qué, pero me dejan enbobado...

Precioso repaso a tu niñez, un abrazo!

Puerta 15 dijo...

Sevillana, como te dije, todos tenemos las mismas fotos de esa época. Y con el encanto del blanco y negro.

sevillana dijo...

Algunas de ellas Du Guesclin ni las recordaba hasta que las he visto y solo ha sido una parte de mi niñez, aún queda mucho por contar.
Besitos

Pues si Puerta 15 en esa época solo exitian las fotos en blanco y negro y las de la Feria o el Parque de María Luisa tenemos que tenerlas muchos de nosotros, somos de la misma quinta.
Saludos

Zinquirilla dijo...

Me refería a todo lo no vivido en general, me gusta mi época y no pienso que todo lo pasado sea bueno pero es que soy nostálgica empedernida, jeje.

Por cierto no quiero cotillear pero creo que conozco a tu hermnao mayor, fue por casualidad capataz de Los Panaderos?

Saludos!

sevillana dijo...

Pues si, Zinquirilla mi hermano el mayor fue capataz de varias hermandades entre ellas de los Panaderos.
Besitos

Zinquirilla dijo...

Bueno ya te preguntaré por correo, me da apuro hacerlo aquí por el blog, es que creo que conozco a tu hermano!

(vecino del barrio)

Por cierto, estamos ahora misma visitándonos :)