Al toque de flauta y tamboril los romeros van levantandose cuando aún no ha amanecido pero ya se va deslumbrando el alba y tras un pequeño rezo, la Hermandad se pondrá de nuevo en camino en dirección a la Raya Real.
Muchos Kilómetros de arena, muchos peregrinos, carretas y muchas muchas hermandades serán las que se concentrarán en este punto del camino.
A las doce de la mañana se hará un silencio absoluto, los motores de los tractors quedarán parados y solo se escuchará el rezo del Angelus por los peregrinos.
En este punto del camino también habrá que echarle una mano a los que se han quedado metidos en las arenas. Aquí todos somos hermanos.
Y llegaremos a palacio del Rey en donde acamparemos y pasaremos el resto de esta jornada.
Mañana cruzaremos el puente del Ajolí, ya estamos más cerca de Ella.
Y me pongo a cantar
2 comentarios:
Algún día supongo que tendré que hacer el camino.
Nunca me ha atraido el Rocío, no sé si será porque en casa la religión se entendía con túnicas o porque mis fechas de gloria acababan en Feria.
No obstante lo respeto y supongo que para un rociero llegar a la aldea debe ser algo parecido a lo que yo siento cuando mi Hiniesta sale a la calle.
De todas formas, si siempre se escribiese y describiese el rocio y el camino como lo haces tu, seguramente seríamos más los que lo intentásemos comprender.
Y cómo te digo más arriba, algún día me gustaria hacer ese camino, de la mano de mi mujer y pensando en nuestras cosas.
Un beso.
Ps: Aunque para camino, el palizón que me pegue en autobús yendo y viniendo de Barcelona.
Dicen que cuando se hace el camino por primera vez es muy difícil no volver, eso es lo que me pasó a mi que fui varios años pero por circunstancias personales me es imposible ir ahora, pero se, que algún día volveré a cruzar el Quema, a pisar las arenas y a cantar y bailar en el puente del Ajolí.
Con quién mejor que tu mujer para hacer el camino andando.
Besos
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